Para muchos el termino insurrección no tiene ningún significado; Pero para Chiu longina autor del texto nadie habla de insurrección, si ya que para el la mayoría de las sociedades viven aletargadas entre los medios de comunicación que solo tienen como únicos objetivos cautivar la atención de aquellas personas, las cuales su mente nunca lanzan una vos de protesta y entrar en el mercado capitalista haciendo de sus corporaciones un servicio necesario para muchos y de esta manera engrosar sus bolsillos.
La insurrección es el levantamiento, sublevación, o rebelión de un pueblo contra la autoridad. Pero hay muchas razones para que no vivamos una insurrección personal, la falta de educación, la intervención de los medios de comunicación, la oligarquía que padece el pueblo colombiano y muchos otros estados en el mundo, el poder económico, la educación, la pobreza entre otras.
Aquel pensamiento de sublevación se ha perdido con el pasar de los años, en nuestros tiempos vemos como aquellas personas que lo quieren hacer son apartadas de cualquier contexto para que no sean escuchados y no formen aquellas revoluciones que nuestros pueblos necesitan de aquello que para nosotros es imparcial o poco ético, pero que no hacemos nada para cambiarlo.
En nuestros tiempos nos vemos maniatados frente al capitalismo que en ocasiones actúa como un promotor a la negación de culturizar a los ciudadanos y no permitirles acceder a nuevos conocimientos o aportes que sirvan como disparador o catalizador de ideas en nuevos talentos.
Esta cuestión surge a partir, de privar a las personas de escasos recursos a ingresar a sitios los cuales dentro del contexto normal fueron construidos para el aprendizaje y el aporte de nuevas creaciones a la cultura; pero la causa de privación es debido a que estas institución de carácter “publico “manipulan y crean un mercado a algo que no debería tener precio.
En mi concepto con respecto al texto, la cultura a la cual tenemos derecho dentro de un estado democrático y de libre participación esta siendo instrumentalizada y emplea para beneficio de algunos y se pierda su objetivo principal que es servir como herramienta y transformación para el desarrollo social.
Nosotros como pueblo debemos cambiar esta problemática y de esta manera hacer de la cultura un instrumento que sirva para acrecentar el consumo de cultura y de ninguna manera conformarnos con realitys y novelas de romanticismo. Esta situación esta en nuestra manos y por ninguna razón debemos dejar que la cultura sea productiva en otros campos y tenga como su único enfoque el social.
De esta forma proponer que dejemos de ser “masa humana” y nos convirtamos en un pueblo que cuestiona cualquier aspecto y que exijamos que nuestros gobernantes, instituciones, y entidades gubernamentales se concienticen del compromiso social adquirido y sean gestores de una vida intelectual en nuestro país y en el mundo. La sociedad no puede ingerir todo el material que nos brindan la televisión, radio o prensa sin generar alguna controversia y así despertar la curiosidad de muchos por conocer lo que no se cuenta.
Para mi el despertar estará en la educación que reciban nuestros descendientes y esa creación de conciencia ciudadana, y que por medio de insurrección personal se saque toda la cultura a la calle y no se encierre con llaves o en otro caso se restringa con derechos de autor y se niegue la posibilidad de aprender, y que esto no sea solo para aquellas personas que cuentan con los recursos para hacerlo sino para esas personas que tienen el deseo de adquirir nuevos conocimientos; mantener la cultura no es tan solo convertirnos en unos eruditos sino apropiarnos de nuestras tradiciones, y nunca cambiarlas por aquellas que vemos o sentimos nos convierten en un país mas moderno pero que nos hace perder nuestra identidad a la que debemos ser fieles y conservar como un patrimonio de gran importancia.
Sin duda lo que se vive no es una niebla, lo que padecemos es un enanismo mental que de una u otra forma no nos permite enfrentar sin algún temor situaciones que nos afectan, pero que callamos y solo aceptamos sin exclamar alguna vos de protesta frente a lo que pasa.
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